Ya ha pasado la mitad del verano y es hora de regresar con este Blog tras una pausa por unas vacaciones que me he tomado. En estas largas y divertidas vacaciones he visitado la capital económica de Canadá entre otras, Toronto.
Un mes, una fantástica experiencia pasada en una casa en las afueras de Toronto de unos filipinos con 6 estudiantes, tres rusas, un brasileño, una de Taiwan, una turca y un turco, eso sin contar con los 38 estudiantes españoles que me acompañaban.
El principal atractivo de esta ciudad es la CN Tower, la torre más alta del mundo, pero nunca te impresiona realmente hasta qe la tienes encima. Pero sus enormes rascacielos o sus centros comerciales tampoco se quedan cortos y le convierten en la quinta ciudad más grande de EEUU y Canadá. Si visitan esta ciudad recuerden también visitar «Toronto Islands» ya que las vistas desde el barco que te lleva a las islas son dignas de Nueva York. Podrán también disfrutar de la playa del gigantesco Lago Ontario en el este de la ciudad. No olvidar el Rogers Centre donde los «Blue Jays», equipo de béisbol de Toronto, juega casi todos los días. Su transporte público, muy fácil de usar, tiene diversos problemas, principalmente en el metro ya que por lo menos en mi estancia ha sido cerrado varios días diversas paradas. Apenas a una hora encontramos «Niagara Falls» unas impresionantes cataratas que se encuentran en Canadá y USA, para mí la parte más impresionante del viaje. También cerca se encuentra «Wonderland», un parque de atracciones impresionante, no recomendado para los que se mareen con facilidad, y lo digo por propia experiencia.
Por un «chirimiri» ha habido inundaciones en Toronto, incluyendo en el metro, también por estas inundaciones nos quedamos alrededor de quince horas sin luz en gran parte de Toronto, y en algunas partes veinticuatro horas incluso.
Por último dejar una anécdota, la última noche la tuve que pasar en otra casa diferente a la que había estado todo el mes y debido a que me trasladé a la noche a esa casa no vi muy bien el camino por donde pasaba el tranvía así que a la mañana siguiente justo antes de ir al areopuerto para coger el avión me vi en el tranvía correcto en «Chinatown» y al parecerme extraño pasar por éste barrio para ir a esa casa, me preocupé, y me bajé del tranvía y gracias a un amable canadiense llegué a coger el avión ya que me dio 20 dólares para poder coger un taxi. Mi casa estaba en «Little Italy» un barrio al lado del que ya estaba.
Gracias pueblo canadiense.
Les dejo unas fotos:
Cuando nos veamos, nos tienes que explicar mejor la anécdota final, Javier. No sé si la hemos entendido muy bien… Si no te llegan a dar los 20 dólares, ¿qué te hubiera pasado?
Vale, ya os explicaré.
A mí, lo que me sorprendió de la CN Tower fue el Glass Floor. Ver el suelo bajo tus pies a 300 metros de altura da miedo!